El proyecto Wrapped Internet considera, sin embargo, que internet sí es un territorio y que por lo tanto puede ser intervenido. Tomando procedimientos prestados por el land art, desarrollaron una extensión de Chrome que permite envolver y cubrir con telas cualquier página web, como si internet se tratara de una cosa sin límites; como un universo en la pantalla.
Esta técnica de opacidad funciona sobre la premisa de la alienación. Mientras propone el extrañamiento y la oclusión de la materialidad numérica de la web, también hace surgir, bajo el contorno de la tela, a la territorialidad de internet. En una táctica xeno-arqueológica, la otredad de internet se hace presente y junto a la memoria de la conjunción (y, y, y) aparece la imaginación de la derivación (o, o, o): así se ingresa al sueño (z, z, z).